Los expertos de la ONU alertan de los efectos del cambio climático sobre los océanos y la criosfera

El pasado miércoles, 25 de septiembre de 2019, el IPCC, expuso en un comunicado (ver aquí) las principales conclusiones alcanzadas en su Informe especial sobre los océanos y la criosfera en un clima cambiante, en el que alerta sobre los efectos que el calentamiento global tendrá sobre los océanos y la criosfera, término empleado para referirse a los componentes congelados del sistema Tierra.

Se trata del tercero de una serie de informes especiales elaborados en el sexto ciclo de evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático y ha sido elaborado por 104 autores de 36 países.

El IPCC, órgano de las Naciones Unidas encargado de evaluar los conocimientos científicos relativos al cambio climático, pone el acento en que las decisiones que se tomen ahora son fundamentales para el futuro de los océanos y la criosfera, atendidos los beneficios que supondría la adopción de medidas de adaptación ambiciosas y eficaces en pro del desarrollo sostenible y el incremento los riesgos y costes asociados al cambio climático que entrañaría la postergación de dichas medidas.

En el informe se advierte de que, como consecuencia del aumento de la temperatura media del planeta, se está produciendo la pérdida de la masa de hielo de los glaciares, lo que unido al retroceso de la criosfera en regiones de alta montaña incidirá negativamente en las actividades de ocio, el turismo y el patrimonio cultural. Asimismo, la menor disponibilidad de agua asociada al deshielo repercutirá en numerosos sectores, como el agrícola y el hidroeléctrico. Por otra parte, el incremento de la temperatura y la acidificación del agua de los océanos han reducido el potencial de capturas de pesca a nivel mundial.

Adicionalmente, el IPCC llama la atención sobre otros efectos adversos derivados de los cambios que el calentamiento global provocará en los océanos y la criosfera, como son el incremento de la frecuencia e intensidad de fenómenos climatológicos extremos y el incremento del riesgo de inundación de las zonas costeras e insulares.

No obstante, el referido Informe pone también énfasis en que una reducción urgente de las emisiones de gases de efecto invernadero, en consonancia con el objetivo que los Gobiernos se marcaron en el Acuerdo de París, limitaría los cambios en los océanos y la criosfera y permitiría conservar ecosistemas valiosos. Por ello, el IPCC insiste en la importancia de adoptar medidas en ámbitos como la energía, la tierra, los ecosistemas, las zonas urbanas, las infraestructuras y la industria.