El PERTE Chip: una apuesta por la industria española de microelectrónica y semiconductores
Con su aprobación, el Gobierno pretende dar respuesta en sede nacional a la necesidad de incrementar la capacidad de producción de microchips en la Unión Europea.
El objetivo general del denominado PERTE Chip, aprobado por el Consejo de Ministros del pasado 24 de mayo, se identifica con el desarrollo e impulso de las capacidades de diseño y producción de la industria española de microelectrónica y semiconductores, a fin de generar un importante efecto multiplicador no solamente sobre los sectores propiamente tecnológicos sino también, y por extensión, sobre el conjunto de la economía española.
Para ello, se prevé el despliegue de un conjunto de actuaciones basadas en los siguientes 7 principios:
- Vocación de largo plazo, ante la necesidad de que el apoyo público y privado sea permanente y sostenga el pulso innovador de toda la cadena de valor.
- Priorización, para evitar que una dispersión temática de la inversión pueda poner en riesgo las actuaciones planteadas.
- Avance por etapas, como modo general de implementación, de manera que se atienda a un grado de evolución coordinada de cada una de las fases propuestas, especialmente ante el elevado riesgo tecnológico y el volumen de las inversiones requeridas.
- Liderazgo técnico, preponderante frente a las decisiones de otra índole.
- Colaboración público-privada, orientada a objetivos comunes e impulsada mediante una acción coordinada de las Administraciones públicas, la industria, las universidades y los centros de investigación.
- Carácter integrado, abarcando toda la cadena de valor de la industria de semiconductores y complementándose con el resto de PERTEs aprobados hasta la fecha.
- Alineamiento con la Ley Europea de Chips.
Con tales premisas el PERTE Chip delimita su ámbito de actuación en torno a los 4 ejes siguientes, que abarcan diferentes ámbitos de la cadena de valor:
1) Refuerzo de la capacidad científica. Orientado al refuerzo de las capacidades de I+D+i, con foco en los microprocesadores de vanguardia y de arquitecturas alternativas, la fotónica integrada y los chips cuánticos, y a dar continuidad al Proyecto Importante de Interés Común Europeo sobre Microelectrónica y las Tecnologías de la Comunicación (IPCEI ME-TC).
Este eje se articula a su vez en 4 líneas de actuación, con un presupuesto total de 1.165 millones de euros: (i) desarrollo de I+D+i sobre microprocesadores de vanguardia y de arquitecturas alternativas (475 millones de euros); (ii) desarrollo de I+D+i en fotónica integrada (150 millones de euros); (iii) desarrollo de I+D+i en desarrollo de chips cuánticos (40 millones de euros); y (iv) línea de financiación al IPCEI ME-TC (500 millones de euros).
2) Estrategia de diseño. A fin de reforzar el ecosistema de diseño español mediante la constitución de fabless de microchips de vanguardia y de arquitecturas alternativas, el desarrollo de pilotos de pruebas y la creación de una red de educación, formación y capacitación que fortalezca el capital humano del sector.
Se estructura en 3 líneas de actuación, con un presupuesto total de 1.330 millones de euros: (i) creación de empresas fabless de diseño de microprocesadores de vanguardia y de arquitecturas alternativas (950 millones de euros); (ii) creación de líneas de pilotos de pruebas (300 millones de euros); y (iii) creación de una Red de educación, formación y capacitación en materia de semiconductores (80 millones de euros).
3) Construcción de plantas de fabricación en España. Para incrementar las capacidades de producción industriales, mediante la construcción de foundries de tecnologías de vanguardia y de tecnologías de gama media, susceptibles de llegar a enmarcarse en lo previsto por la Ley Europea de Chips.
Contempla 2 líneas de actuación, con un presupuesto total de 9.350 millones de euros, para reforzar la capacidad nacional de producción de: (i) semiconductores en la fabricación de tecnología de vanguardia o por debajo de los 5 nanómetros (7.250 millones de euros); y (ii) semiconductores en la fabricación de tecnología de gama media o por encima de los 5 nanómetros (2.100 millones de euros).
4) Dinamización de la industria de fabricación TIC española. Con el objetivo de realizar un diagnóstico detallado de la realidad de la industria de semiconductores previo al despliegue de incentivos para la creación de industria manufacturera de productos TIC y al lanzamiento de esquemas de apoyo público al ecosistema emprendedor de semiconductores.
Cuenta con un presupuesto total previsto de 400 millones de euros, repartido al 50% entre 2 líneas de actuación: (i) esquema de incentivos a la industria manufacturera TIC; y (ii) creación de un fondo de chips.
Las cantidades presupuestadas serán distribuidas en períodos anuales, activándose las primeras líneas, programas o convocatorias durante este mismo año 2022 y extendiéndose algunas de ellas hasta el año 2027.
En lo que respecta a la gobernanza del PERTE, destaca el denominado Comisionado Especial para el Proyecto de Microelectrónica y Semiconductores, al que se atribuye una función de impulso y coordinación esencial para el despliegue de todas las actuaciones proyectadas, dotándolo del necesario perfil directivo y técnico, así como de una estructura y nivel de representación adecuados para alcanzar una sincronización efectiva interna y externa y un diálogo coherente de alto nivel con la industria sectorial. En este sentido, por ejemplo, se prevé contar tanto con un grupo de trabajo interministerial, con funciones decisorias y de coordinación, como con un grupo de expertos, de naturaleza asesora y formado por diferentes personas especializadas del mundo académico, científico o empresarial que sean referentes en el campo de los semiconductores.