Propiedad Industrial y Comercio Electrónico
La propiedad industrial es un término legal que otorga a los titulares de derechos sobre intangibles la exclusividad en la explotación comercial de los mismos en el mercado. Dichos intangibles comprenden, entre otros, los derechos sobre patentes, marcas, diseños, dominios de Internet así como know-how o secretos industriales.
En los últimos años el valor de dichos activos intangibles se ha incrementado en comparación con los activos tangibles de las empresas (inmuebles, maquinarias etc..) debido a la importancia que la tecnología representa en la actual economía moderna.
Existen múltiples razones por las que la correcta protección de la Propiedad Industrial es fundamental a la hora de iniciar con garantías el lanzamiento de una empresa a través de Internet, ya que el comercio electrónico radica en el ofrecimiento, venta o licenciamiento de productos, servicios o de tecnologías protegidos por derechos de propiedad industrial.
La importancia del comercio electrónico es un hecho constatado, tal y como se desprende de los datos publicados en el informe de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones para 2012, en el que se aprecia la tendencia generalizada de los consumidores españoles para llevar a cabo adquisiciones de productos y servicios a través de Internet; y así en el primer trimestre del 2012 el comercio en España alcanzó unos volúmenes totales de negocio de en torno los 2.500,00 millones de €, lo que supone un incremento de un 19,3 % con respecto al mismo periodo del 2011.
Es por tanto recomendable que el lanzamiento de un Portal de venta de productos on-line lleve aparejada una política sólida de protección de contenidos (software, Interfaz) y de derechos (marcas comerciales, diseños,) que permitan a los empresarios competir y que se respeten la originalidad de sus tecnologías o la distintividad de sus productos por los terceros.