Los derechos del inversor
Los tiempos de recesión económica que, esperemos, empezamos a dejar atrás, pusieron de manifiesto los vacíos que existían en la normativa de protección de los consumidores en la adquisición de productos financieros. Si a esto sumamos la mayor complejidad y sofisticación de los mercados financieros, el cóctel está servido, y no han sido pocos los consumidores y empresas que contrataron productos financieros sin tener claro su funcionamiento y consecuencias.
A pesar de haber aprendido la lección, los bajos tipos de interés actuales, la baja rentabilidad de los depósitos, las caídas de los mercados y, en general, las condiciones de rentabilidad para los inversores, pueden empujarnos de nuevo a la búsqueda de mayores cotas de rentabilidad que, como sabemos, llevan aparejadas la asunción de mayores riesgos. Por ello, parece oportuno que hagamos un repaso por los derechos fundamentales del inversor en la contratación de productos financieros.
En primer lugar recordar la conveniencia de comprobar que contrata con entidades autorizadas (evitando los denominados ‘chiringuitos’ financieros). En caso de duda, puede comprobar que la entidad está inscrita en la CNMV y autorizada a prestar el servicio que le ofrece.
Su entidad, a través de los ‘test de conveniencia’ y el ‘test de idoneidad’ le formulará diversas preguntas que permitirán asesorarle de la forma más adecuada a sus conocimientos, experiencias previas y objetivos de inversión. Cuanto mejor le conozca su entidad mejor servicio podrá prestarle. Solicite la información por escrito, tanto sobre las características, riesgos y costes de los productos o servicios que le ofrezcan, como sobre las recomendaciones de inversión. Lea atentamente la información y, si tiene dudas, resuélvalas. No firme ningún documento sin aclarar todas sus dudas, ni cuando entienda que alguna cláusula no responde a la realidad o le puede perjudicar. Tómese el tiempo necesario para tomar la decisión y conserve toda la documentación.
Su entidad, conforme a la normativa, debe proteger al inversor, de forma que, cuando preste servicios de inversión, deberá de actuar de forma honesta, imparcial y profesional en el mejor interés de los clientes. Deberá proporcionar información imparcial, clara y no engañosa, de forma que sus clientes puedan comprender los productos y servicios ofrecidos y tomar decisiones informadas, teniendo en cuenta las circunstancias personales de los clientes. Con ello se evitará que usted contrate productos no ajustados a su perfil o que no satisfagan sus necesidades o expectativas.
Profesional de contacto